Si preguntas a un número determinado de
personas sobre si quieren ser felices, hay una gran posibilidad de que
cada una de ellas respondan con un rotundo "sí". Es obvio que deseas
desde lo más profundo de tu interior que tu vida sea lo más tranquila y
alegre posible, pero quizás no estés dispuesto(a) a actuar de la forma
correcta para lograrlo, y así alcanzar esa paz interior tan anhelada por
ti.
Por otra parte, existe una reacción que puede llegar a ser una de las
mayores barreras en tu camino para obtener el dulce néctar de la
felicidad. Dicha reacción es la muy concurrente queja, la cual
está muy presente en aquellos(as) que suelen llevar una vida infeliz y/o
desdichada.
Si en estos momentos reconoces que no eres
feliz o no lo eres como te gustaría serlo, entonces en este preciso
momento tienes 2 opciones: #1 puedes seguir quejándote y suponer que te
va a ocurrir algún milagro para que te haga feliz, o #2 puedes hacerte cargo tú
mismo(a) de ser feliz y tomar la responsabilidad de guiar el rumbo de tu
vida. ¡Tú eliges!
Si en realidad deseas tener paz interna, quejarte es uno de los hábitos que por
obligación tienes que abandonar, tan pronto como sea posible. Hasta
ahora, aún no he visto a la primera persona, la cual sea feliz y esté
constantemente gruñendo por alguno que otro acontecimiento a su
alrededor.
Por lo que, la felicidad y la queja no están
en el mismo renglón, al contrario, se encuentran en lados opuestos. En
caso de que no te agrade alguna situación, es preferible que controles tus
emociones y escoger aquellas que te proporcionen la paz mental que buscas. Sé inteligente para hacer la mejor selección.
De igual importancia, siempre he dicho que
nada ni nadie puede hacerte sentir infeliz o triste, los demás no tienen
ése poder sobre ti y nunca lo tendrán, a menos que tú se los permitas.
No es lo que sucede lo que te provoca sentimientos amargos e
indeseables, sino la forma en que percibas éso que te sucede. Así que,
dale mayor prioridad a tus pensamientos positivos.
Finalmente, renuncia a tus lamentaciones
constantes y recuerda que todo lo que te pasa, ya sea bueno o malo, trae
consigo una pizca de humor. Trata de observar el lado positivo y cómico
de cada situación, y sonríele a la vida. Vive feliz y lleva una
sonrisa como tu arma secreta contra los momentos no gratos para ti, así
te será más sencillo bailar con la atractiva felicidad.
MUY BUENO
ResponderEliminarDe eso se trata amiga. Gracias
ResponderEliminar