> marzo 2016 ~ "APRENDE A VIVIR Y SER FELIZ"

29 mar 2016

El temor, de forma generalizada, es un personaje muy presente en la vida de casi todos los seres humanos, por no decir en su totalidad. Y tambien, es un tema extremadamente tratado en innumerables ocasiones a lo largo de los años, ya sea de forma científica, psicológica, etc. Éste ha sido relacionado con la incapacidad o negación de una persona para llevar a cabo una acción de forma efectiva, es decir, la no creencia de que lo venidero puede ser algo bueno.

El miedo a ser tú mismo es señal de una falta de seguridad por parte de ti, además de una fuerte ausencia de autenticidad u originalidad. Esto puede estar sujeto directamente a la necesidad de querer agradar a otros a tu alrededor y a una autoestima baja, por lo que allí, nace el temor a emprender acciones de manera natural y/o propia.
 
¿Alguna vez te has cuestionado lo siguiente: por qué es tan agotador ser tú mismo(a)? La clave es el concepto que tengas de tu yo verdadero. El amor propio es un pilar esencial al momento de hacer una valoración  de tu persona. Si no posees un buen grado de autoestima, esto imposibilita que confíes en tus habilidades, y por ende, no podrás ser como verdaderamente eres, dejando a un lado la dicha de ser único(a) y la oportunidad de dejar tus propias huellas.

Entonces, si continuas ubicando el diario vivir fuera de tu propio ser, en torno a los demás y/o a los deseos de éstos, tu confianza y amor propio se irán debilitando hasta llegar a la terrible depresión. En este ámbito, será más difícil para ti realizar aquellas cosas que en verdad deseas, esas que se encuentran en tu corazón, ya que la inseguridad te paralizará sin permitir que avances.

Es normal que, a veces, tu mente se inunde de temores, pero ellos solo viven en ése lugar; en tu imaginación mental sobre algunas cosas. Sí, no existe el miedo, es solo una ilusión o interpretación tuya, tú mismo(a) la creas. Fortalécete de seguridad y coraje, y así te darás cuenta de que puedes controlarlo desde tu propia mente.

Finalmente, ¿sabes lo que pasaría si no sintieras la sensación de miedo de forma seguida? Harías lo que en verdad quieres hacer, vivirías como deseas con toda tu alma, serías feliz.  Por lo tanto, tómalo como un reto, mira tus dudas de frente y verás que no son tan grandes como una vez pensaste. No continúes permitiendo que te paralicen y combátelas desde su origen; tu mente.

No importa que te amen o te critiquen, te respeten, te honren o te difamen, que te coronen o te crucifiquen; porque la mayor bendición que hay en la existencia es ser tú mismo.
- Osho - 
 

25 mar 2016

Muchísimos seres humanos están atados a un destructor emocional llamado apego. Éste se puede definir como la idea irracional que tiene una persona de necesitar una que otra cosa (no básico para existir) para poder vivir, estar bien y ser feliz. Lo cual es contraproducente para la felicidad, ya que ésta se caracteriza por un estado pleno y de no necesidad.

Asimismo, no quiero mal interpretaciones, no me estoy refiriendo a las necesidades básicas y racionales de todo ser humano (la vida, alimentación, agua, respiración, cuidado, vestimenta, sexo, seguridad, salud, autorrealización, entre otras), las cuales son los pilares de tu existencia y es obvio que debes velar por ellas. 

Pero e incluso éstas, pueden llegar a un nivel que se considere como apego emocional, si se convierten en una búsqueda insana de ellas.
 
Así que, hago referencia a desapegarte de aquellas cosas que no son esenciales para el bienestar emocional de tu persona, las cuales escalan a un nivel en donde piensas que sin ello es imposible ser feliz, como son: necesidad excesiva de aprobación externa, de obtener siempre la victoria, del poder, de tener dinero, de querer que otra persona te quiera o permanezca contigo, entre otras muy dañinas que pueden afectar directamente a tu mundo interno.

No obstante, esto no significa que te olvides de lo que quieres, sino llegar al punto de no permitir que afecten tu vida interior, es decir, buscar lo que te apasiona es sano, pero creer que es primordial para ser feliz se torna muy dañino.

Por ejemplo: si deseas comprar algo porque te gusta, es razonable pero, si en caso de no adquirirlo te sientes triste o mal, entonces esto es apego. Si amas a alguien y te interesa que esa persona haga lo mismo, es normal pero, si ésta no corresponde a tu sentimiento y te afliges, es también apego. En pocas palabras, para todo existen 2 niveles; uno que es aceptable y otro que es tóxico. Sé sabio(a) y aprende a distinguirlos. 

El desapego hacia alguna cosa o persona, se logra cuando puedes involucrarte pero no atarte a ello. De manera que puedas disfrutar de su interacción y a la misma vez, ser capaz de soltar cuando su etapa termine o en el momento en que haya que hacerlo.

La clave está en alcanzar un estado mental en donde puedas diferenciar entre desear y necesitar algo para estar bien. De esta forma, podrás evitar a toda costa el apego, si lo que anhelas es ser feliz. El desapego es algo adquirido, por lo tanto, depende de ti aprender su magia. Sí, se puede.

En fin, si logras desapegarte de lo que te rodea (no es vivir sin importarte nada ni nadie, es vivir de forma plena e inteligente), llegarás a ser tan sereno(a) que será muy difícil que las cuestiones exteriores puedan desordenar tu paz interior. Un estado emocional que va más allá de lo superficial, más allá de las palabras.

20 mar 2016

Es muy fácil y sencillo caminar por la vida culpando a los demás de casi todo lo que te ocurre en tu vida, para así no asumir la gran responsabilidad que conlleva estar en este mundo como un ser humano viviente. Por lo tanto, no esforzarte por controlar la mayor parte de las cosas que te suceden, es sin duda alguna, un escape a la realidad que todos tenemos, el poder de hacerte cargo de ti mismo(a).

Eventualmente, continuar atribuyendo a otros por lo que pasa en tu existir, es como demostrar que eres un barco a la deriva en un mar agitado, en donde estás sin rumbo alguno, a la disposición de factores externos y sin interés de tomar el dominio de tu destino.

Asimismo, renunciar a buscar culpables a tu alrededor para acusarlos por aquellas cosas que te afectan de una u otra forma, es una de las decisiones vitales que debes tomar, si en verdad deseas con el corazón, ir al maravilloso e indescriptible viaje de la felicidad.

También, deberías encontrarte contigo mismo(a), meditar y preguntarle a tu yo interno: ¿Qué gano con responsabilizar a otra persona de lo que pasa en mi vida? ¿Acaso estoy delegando el poder que se me ha otorgado, de ser lo que quiero ser? ¿Continúo permitiendo que vivan por mí? Son cuestiones importantes para conocer si controlas tus pasos o alguien más lo está haciendo por ti.

Para finalizar, debo decirte que nadie tiene autoridad para controlar tu vida, a menos que cedas que lo hagan. Empieza a tomar las riendas de tu vida y no accedas a ser infeliz por causa de acciones de los demás. Así que, solo tienes una vida, toma el timón de tu camino y haz que valga la pena esta inigualable aventura llamada vida.

"Culpar a los demás es no aceptar la responsabilidad de nuestra vida, es distraerse de ella".                                                                                                             Facundo Cabral

17 mar 2016

En tu vida, pasas una gran cantidad de tiempo en conversaciones con personas que transitan en tu camino. Y en muchas de dichas ocasiones, en las cuales tienes una que otra discusión o debate, sobre algún tema en particular con otros, sueles querer a toda costa imponer tus ideas por encima de los demás, e incluso sabiendo que las cosas pueden salirse de control.

Por lo que, esta reacción es algo normal y racional, pero llega un momento en que dicha interacción se torna un poco ríspida. Allí entonces, puede estar en riesgo el quiebre de una buena amistad o provocar algún tipo de descontrol emocional, al decir algo que no debías haber dicho. Y por ende, causar algún disgusto, rencor, estrés, dolor o tristeza, tanto a otros como a ti mismo(a).


En dicho caso, deberías hacerte esta pregunta: ¿prefiero estar en paz mental o estar en lo cierto a como dé lugar, sin importar a quienes les pueda provocar daño? Tranquilízate, analiza esta interrogante y escoge la opción que más te permita ser feliz. Actúa de forma sabia, para que así logres estar es un estado pleno y alegre la mayor parte del tiempo posible.

Finalmente, es necesario decirte que, la ventaja de tener una vida armónica y con el menor grado de turbulencias, es sin dudas, un estado personal esplendido y admirable. "Sé selectivo(a) en tus batallas, a veces tener paz es mejor que tener la razón". Autor anónimo

16 mar 2016

Algunos se hacen la idea de que muchas personas nacen con algo genético (heredado) que les permiten a unos ser felices y a otros no, como si la felicidad tuviese que ver con algo físico o tangible del cuerpo humano. Dichas personas, no tienen la más mínima idea de lo que dicen al hacer este tipo de comentarios, ya que dicho argumento no existe como válido.

Por consiguiente, la felicidad es una habilidad aprendida en el transcurso del camino de la vida de cada ser humano, y no una cualidad innata que traemos al nacer. Es decir, es una cuestión de adquisición, ir aprendiendo a través de las experiencias que vivimos, en vez de ser una predisposición de nuestros genes.

Normalmente, la gente se hace la idea irracional de que alguien puede brindarles la alegría y la paz emocional que buscan, sin darse cuenta de que es algo que depende de cada quien adquirir. Y no es que tus antecedentes pueden influir genéricamente para que tengas una inclinación para que logres ser feliz con mayor facilidad, sino que es una cuestión tuya serlo, y de nadie más. 

Así como aprendes a caminar, correr, bailar, comer, etc., de esta misma forma es como obtienes la destreza de estar en armonía con tu vida y el resto a tu alrededor. Es un cometido únicamente de tu persona, por lo que, inicia el camino interior de la felicidad y vive a su máxima expresión.

Así que, sobre ti recae la responsabilidad más dura, pero a la misma vez, la más especial y única que puede ser otorgada a una persona, me refiero al poder inmenso que tienes para ser feliz, aún seas quien seas y tengas lo que tengas. Por lo tanto, de ti depende hacer de tu existencia un paraíso o un infierno, tú elijes.

Para concluir, debo mencionar que, así como aprendes un tema en específico en tu escuela o universidad, de ésa misma manera puedes aprender a ser feliz. Dicho esto, si actualmente eres infeliz o no tan feliz como quisieras ser, debes saber que tienes la potestad para cambiar tu vida para siempre, utilizando tu mente como motor para lograrlo. Y si lo decides con certeza, tendrás la oportunidad de ser la persona que tanto de deseas ser. Un poder a la espera de ser usado por ti.

15 mar 2016

En algunas ocasiones, hay personas que se preguntan lo siguiente: "¿por qué unos que no tienen muchas cosas a su favor, logran ser felices con lo poco que tienen. Sin embargo, otros no pueden conseguir serlo, aún teniéndolo todo a su alrededor?". Gran pregunta, ¿no crees?.


Es cierto, existe una diferencia entre aquellos que buscan su felicidad en asuntos físicos y otros que acuden a lo no físico. Los primeros son muchos más propensos a ser infelices, mientras que los segundos tienden a ser felices su mayor parte del tiempo. 


Así mismo, éstas últimas personas buscan la manera de ser felices, sin importar si tienen problemas de salud, económicos, familiares, etc. Sin embargo, existen otros que, a pesar de tener algunas comodidades para disfrutar y ser felices, no logran serlo, por más que busquen y busquen.


Quizás, te estés preguntando, ¿por qué ésta incoherencia?. ¿Sabes por qué? Porque la felicidad, nunca va a depender directamente de cosas materiales ni asuntos exteriores, escúchame bien ¡nunca!. Ni por error trates de colocarla allí. 


Por lo que, el único lugar en donde habita tu felicidad es donde pocos suelen buscarla, en su propio interior, en su alma, en su mente. En el momento en que comprendas esta gran verdad, serás feliz. 



En conclusión, tú puedes ser feliz desde este mismo instante, no importa por lo que estés pasando, buen o mal momento, nada de esto tiene que ver con la llama de tu felicidad, ella siempre va a depender de la calidad de tus pensamientos. Trabaja duro en tu mente y aprende a ser feliz, ¿qué esperas?.

14 mar 2016



La vida, algo tan fugaz y un problema tan sencillo de resolver en su conjunto, como nacer, crecer, reproducirse y morir. Pero puede ser a la misma vez,  muy misteriosa,  llena de miedos y preguntas sin respuestas por parte de los que habitan en ella. Te pasas mucho tiempo de tu vida intentando
La inteligencia emocional es la clave para tener una vida plenamente feliz y armónica. - Quirico Pujols

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